El equipo de TECHO Puebla llegó a Xoxonacatla como parte de la primera etapa de trabajo; con el hito tangible del ECO (Escuchando Comunidades) parte fundamental de las labores institucionales, los voluntarios trabajaron 6 y 7 de septiembre para decidir junto con la población el curso de las acciones a implementar. La comunidad de Xoxonaclatla se encuentra ubicada en el municipio de Zacatlán de las Manzanas en el estado de Puebla; TECHO llegó a la localidad ubicada en la sierra a mas de 2000 msnm con 38 voluntarios para dar apertura al trabajo en conjunto con los habitantes de dicha entidad.
El ECO realizado durante esos días, arrojó poco más de 130 encuestas, teniendo la intención de generar un diagnóstico mucho más profundo de los asentamientos en los que intervenimos.
La comunidad de Xoxonacatla cuenta con 2260 habitantes, no existe el agua potable, pero debido a que está situada a par de los cerros, cuenta con manantiales de donde se extrae el agua para uso diario, la luz eléctrica llega sólo a la mitad de la comunidad, se cocina con leña y casi en su totalidad los habitantes son trabajadores jornaleros, pues Xoxonacatla se encuentra ubicada en tierras fértiles donde las manzanas, la mora azul, el maíz y el aguacate se cosechan en mayor cantidad, pero nada de eso se ve reflejado en el bolsillo de los campesinos que habitan el lugar: de una caja de 20Kg de manzanas sacan 50 pesos y 80 pesos en moneda nacional por 20Kg de aguacate y eso siendo dueños de las milpas donde se trabaja. En otros casos los habitantes de la comunidad llegan a trabajar por una jornada de 8 horas diarias recibiendo de 15 a 50 pesos según el trabajo a realizar.
El ratio de fecundidad de la población femenina en Xoxonacatla es de 3.50 hijos por mujer, el grado de analfabetismo entre los adultos es de 14.58%, y la comunidad tiene un grado de escolaridad de 4.73. Xoxonacatla cuenta con un estimado de 456 viviendas de las cuales solo el 0.18% cuenta con una computadora y donde el 2.38% de sus habitantes habla una lengua indígena.
Para TECHO es de gran importancia sumar una comunidad más al trabajo en el estado de Puebla, pues se reconoce la relevancia de escuchar a cada una de las familias para tener la base de respuestas a los cuestionamientos que algún día llegaran, después de trabajo e intervención con la comunidad ¿Son los problemas en el lugar los mismos que cuando comenzamos? ¿Cuál ha sido el impacto de los proyectos que en su momento se definieron como prioritarios?, ¿Estamos logrando los objetivos que como organización tenemos? y quizás lo más importante ¿Qué tienen hoy que decir y proponer las comunidades en situación de marginación?
Gracias a este ECO, hoy se conoce con mayor claridad el grado de vulnerabilidad de los asentamientos en los que incidimos y que en esta ocasión, como desde hace poco más de un año, se trabaja hombro con hombro voluntarios y familias, en el estado poblano.
Por Oscar Arturo Proa (Fotos Oscar Arturo Proa / Arturo Daumas Potography)
